Cuando llegó ya había entrado en calor así que dejó su bicicleta en el aparcamiento y entró en lo que más que un instituto parecía un zoo de monos distribuidos por diferentes categorías... Estaban los guays, los friquis, los listillos, los nuevos, los repetidores, etc; como en cualquier otro instituto.
Entró en clase y allí la esperaban Sara y Mica, sus mejores amigas desde siempre; también estaba el que para entonces le parecía el chico más guapo de su curso. Leire estubo durante un tiempo con él, eso de seis meses o así, pero parece que ella no era suficiente para él. Se llamaba Carlos, ya se había olvidado de Leire y tan sólo la veía como una amiga más... En cambio, ella no conseguía sacarle de su cabeza y cada vez que le veía con otra la entraban ganas de salir corriendo y ponerse a llorar.